4 claves para cuidar tus pies y los de tu familia con una rutina diaria

A lo largo de la vida necesitamos ponerles atención para que estén sanos, fuertes, en buena condición y alejados de cualquier problemática.

Así como te bañas diariamente, te untas crema en el cuerpo y te lavas los dientes, es importante seguir una rutina diaria para cuidar de tus pies y los de tu familia. Son una parte fundamental de nuestro cuerpo que nos ayuda a llegar a cualquier lugar que nos proponemos y necesitan recibir la atención que merecen.

Asimismo, la salud de los pies es fundamental y para conservarla, es muy importante hacerse de una buena rutina diaria, que a la larga los mantengan en buen estado.

Por todo esto, te compartimos algunos consejos para tener la higiene necesaria incorporada en una rutina diaria al cuidar, no solo tus pies, sino los de tu familia también.

Lavarlos diariamente
Puede sonar a ser un consejo innecesario, pero nunca está de más. Debes lavar diariamente tus pies y tallarlos con suavidad, no solo dejar que el agua de la regadera les caiga encima. Limpia muy bien entre los dedos, ya que ahí quedan restos de sudor y humedad.

Secarlos bien
Uno de los grandes errores a la hora de cuidar los pies es no tener el cuidado suficiente para quitarles bien el agua después de bañarse, muchas veces se nos olvida hacerlo o no lo hacemos porque tenemos prisa o flojera.

Es importante que dediques de un minuto a un minuto y medio a esta parte de tu rutina diaria, ya que la humedad es un agente de infecciones. Elimina bien el agua para dejarlos completamente secos.

Utiliza algún producto para cuidar tus pies
Existen productos que te pueden ayudar a que tu rutina diaria de cuidado de tus pies sea efectiva y te permita prevenir cualquier afección relacionada.

Por ejemplo, la crema, el polvo o el aerosol de Ting, los cuales cuidan tus pies y te ayudan a prevenir el mal olor, la sudoración y comezón. Si te decides por la crema o el polvo, aplícalo en todo el pie. Puedes utilizar el aerosol para aplicarlo en el interior de tu calzado.

Esta rutina diaria será la mejor manera de prevenir cualquier síntoma. Lo puedes hacer en la mañana pero también en la noche, si pasaste todo el día fuera y tus pies han estado expuestos a la humedad o a cualquier agente que los pueda dañar.

Si lo haces por la noche, no olvides lavar y secar tus pies antes de aplicar cualquier producto.

Cambia tus calcetines y alterna tus zapatos
Cambiar tus calcetines a diario es fundamental, pero incluso si es necesario, hazlo dos veces al día. El objetivo es que tus pies estén secos y libres de sudor. Rocía un poco de algún producto para la higiene diaria, como Ting. Esto hará que tus calcetines estén libres de cualquier agente patógeno.

No uses los mismos zapatos a diario ya que estos se humedecen con el sudor. Lo recomendable es que los dejes descansar un día para que los restos de sudoración puedan evaporarse completamente. De igual manera, es recomendable aplicar algún producto de higiene diaria como Ting para cuidar tus pies de cualquier afección.

Finalmente, no olvides ventilar tus pies seguido. Descansa o mira la televisión con los pies desnudos para que estos se sequen del sudor y puedas evitar la formación de cualquier problemática.

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