Brendan Fraser y la 'ballena' del duelo y la depresión: el triunfo de un actor que emergió de una crisis personal

Como parte de los reconocimientos que Brendan Fraser ha cosechado tras su vuelta a la pantalla grande, uno de los más emotivos ha sido hasta ahora la ovación de cerca de seis minutos que recibió en el Festival de Cine de Venecia en septiembre de 2022, en donde se presentó La ballena, la cinta más reciente del director Darren Aronofsky, esto después de un largo periodo de depresión y declive personal que Fraser vivió durante casi veinte años.

El homenaje espontáneo (y sin duda el momento en que llegó) le arrebató al actor algunas lágrimas.

 En la cinta de Aronofsky, Fraser interpreta a "Charlie", un hombre de mediana edad que, a raíz de sus conflictos personales, derivados en buena medida del divorcio de su pareja y el consecuente distanciamiento de su hija, desarrolla un trastorno alimenticio que lo lleva a comer excesivamente bajo la forma de "atracones". Además de ello, Charlie lleva una vida sumamente aislada, pues la misma situación lo lleva a recluirse en su departamento.

La historia de Charlie ha sido comparada con la del propio Brendan Fraser, quien luego de un ascenso destacado como actor en el cine hollywoodense enfrentó un periodo sumamente adverso a causa especialmente del episodio de acoso sexual vivido en 2003 con Philip Berk (expresidente de la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood, HFPA, por sus siglas en inglés), cuando el actor tenía 35 años de edad y Berk 70.

De acuerdo con lo narrado por Fraser, en ocasión de un encuentro organizado con motivo de la entrega de los Globos de Oro de aquel año (ceremonia que organiza anualmente la HFPA), Berk aprovechó el momento en que saludó al actor para tocarle las nalgas y después los testículos y específicamente el ano. "Su mano izquierda se extiende, me agarra la nalga y uno de sus dedos me toca en el perineo. Y empieza a moverlo", dijo el actor en una entrevista ofrecida a la revista GQ en 2018, cuando hizo pública su versión del incidente, en medio del ímpetu del movimiento #MeToo.

Sin embargo, las consecuencias a nivel personal y profesional de lo ocurrido se desencadenaron desde los primeros meses posteriores al evento. Fraser se retiró de la vida pública y social, aislándose de sus amigos y compañeros de trabajo. En 2007 se divorció de Afton Smith (actriz y escritora), luego de un matrimonio de casi diez años y de haber tenido tres hijos juntos. A ello se sumó el fallecimiento de su madre, acaecido en 2016, que tuvo un gran impacto para el actor.

Su carrera resintió el declive personal, pues a una época de triunfo y celebridad –luego de los años en que protagonizó las cintas de la franquicia La momia (1999, 2001 y 2008)–, su trayectoria prácticamente se eclipsó...

O eso parecía, pues el reconocimiento recibido en Venecia parece confirmar su regreso. Como ocurre en algunos encuentros deportivos en los que uno de los rivales parece derrotado irremediablemente pero de pronto recobra fuerzas, se levanta y termina por vencer, Brendan Fraser parece haber triunfado en una de las batallas más difíciles a las que nos puede enfrentar la vida: la de nuestras propias dificultades emocionales y psicológicas, en la cual podemos contar con ayuda y apoyo de los demás, sin duda, pero que nadie más puede librar por nosotros.

Cabe mencionar finalmente que La ballena es originalmente una obra de teatro escrita por Samuel D. Hunter, publicada en 2012 y que ha sido representada con éxito notable, especialmente en países de habla inglesa.

Luego del estreno en salas comerciales, la cinta ha sido bien recibida por el público. Su próxima prueba serán los Premios Óscar, en donde está nominada en tres categorías: Mejor actor, Mejor actriz de reparto y Mejor maquillaje.