¿Estás en la universidad? ¡Cuida tus finanzas!

La universidad, es una de las experiencias más enriquecedoras de nuestra vida y al mismo tiempo demanda de tanta energía, disposición e ingresos para poder subsistir en el día a día.

Muchos de los estudiantes de nuestro país amenazan sus estudios y lo colocan en una balanza, donde el mayor peso es buscar trabajo y dejar de lado su desarrollo profesional o posponerlo, debido a los gastos en que se incurren.

Esta situación es alarmante para aquellos jóvenes cuyo deseo es desarrollar una carrera, quienes en ocasiones optan por desertar, ahorrar o conseguir un empleo que absorbe sus energías mientras realizan sus estudios.

Partiendo de una encuesta realizada a un grupo de estudiantes universitarios entre 16 y 28 años, la mayor parte de los ingresos económicos provienen de padres, tutores, familiares, alguna que otra beca del gobierno o trabajos de temporales.

En cuanto a transporte, el 62.4% de los estudiantes lo selecciona como el mayor gasto y uno de los más variantes, a pesar de tener otros consumos (comidas, libros y materiales gastables).

Tomando en cuenta las experiencias que nos compartieron dichos estudiantes, te dejamos las siguientes recomendaciones:

Realiza un diario control de tus gastos, de modo que puedas evaluar tu consumo real y conozcas exactamente en qué gastaste el dinero.
Aparta los ingresos para tus estudios de tus gastos fijos.
Distribuye por partes el dinero, es decir, coloca el dinero de la semana o de varios días y vas retirando, de modo que no utilices más de lo planeado.
Solicita apoyo para becas universitarias que ofrecen algunos ministerios y empresas privadas, también, existen universidades que exoneran el pago de créditos a los estudiantes con notas sobresalientes.
Evalúa los gastos de transporte contempla diferentes rutas y utiliza transportes diferentes, para que así puedas tener claro como ahorraras más.
Si vives lejos de la provincia en la que estudias, piensa en compartir un apartamento y sus gastos con un amigo o colega, viviendo lo más cerca posible al lugar podrá ahorrarte dinero de transporte.
Si tienes un ingreso fijo, ahorra en bancos o cooperativas que te generen interés. Esto sirve de apoyo en casos de emergencia, no importa si es poco, esto ayudará a crear el hábito.
Si te es posible, lleva tu comida, agua y merienda a la universidad.
Saca copias de los libros y folletos o utiliza libros de amigos y conocidos que ya hayan cursado las asignaturas.
Organiza tu consumo en actividades sociales y organízate, no asistas si cuentas con un presupuesto limitado.
Es importante tomar en cuenta, que, si existe la oportunidad de tomar clases en la mañana y salir “de día” de la universidad, no tendrías gastos extras en taxis.

Los buenos hábitos financieros de los jóvenes durante sus estudios universitarios, serán determinantes para definir el comportamiento que tendrán en la adultez con relación al manejo del dinero.

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