Cómo tener el súper poder de ahorrar (sin morir en el intento)

¿Realmente es tan difícil ahorrar? Mientras leen en voz baja, más de una persona pensará que esa pregunta ni se pregunta y en silencio, casi en automático, llegarán a la conclusión de que es terriblemente complicado. Luego se irán a comprar unos esquites con los veinte pesos que les sobraron de sus gastos del día.

A veces lo difícil de ahorrar es vencer la desidia de comenzar. Así de sencillo.

Postergamos ese momento porque a lo largo del día tenemos otras cien cosas aparentemente más importantes que hacer y vamos dejando que nuestro cochinito muera de inanición, solo y triste. Dejamos nuestra alcancía nada más esperando que le caiga de milagro una monedita que lo alimente (me detengo un momento para derramar una lágrima).

En otros casos lo complicado no es empezar a ahorrar, sino mantenerse. Iniciamos súper emocionados y a la vuelta de unos días, se nos olvida seguir ahorrando. Es como cuando salimos de una conferencia motivacional, nos queremos cambiar el apellido a Gandhi para iniciar una revolución de amor y unas horas después se nos pasa el ímpetu redentor pues debemos concentrarnos en nuestras actividades cotidianas.

Ahorrar puede ser complicado; hay que vencer nuestra más primitiva y ruda naturaleza humana. En general nos resulta difícil construir hábitos que impliquen privarnos de una recompensa inmediata. ¿Para qué hacer dieta si todo lo que engorda es delicioso? ¿Para qué guardar dinero durante meses si en un día puedo darme pequeños premios que merezco y necesito?

Usemos el tradicional ejemplo del café. Comprar tu bebida todas las mañanas da cierto confort y en algunos casos, estatus; es hasta un ritual social. ¿Y luego? Por barato que sea, si tomas un vaso de 20 pesos de lunes a viernes, en un año habrás gastado alrededor de 5 mil 200 pesos en café. Si eres de gustos más caros y tu bebida sale en 45 pesos, en un 365 días habrás sumado un total 11 mil 700 pesos tan sólo en tu café frappé que además viene con tu nombre. Ese dinero puede hacer realidad metas importantes que quizá hoy parezcan lejanas, porque el sueldo nunca nos parece suficiente para ahorrar.

Si en verdad quieres triunfar en esto del ahorro, lo primero que debes hacer es diseñar un plan. ¿Para qué quieres ahorrar? ¿Qué gastos estarías dispuesto a recortar para cumplir con tu objetivo? ¿En cuánto tiempo debe ocurrir?

“Cuando escribes tus propósitos y les pones fecha, se convierten en un objetivo. Cuando divides el objetivo en pequeños pasos, se convierte en un plan. Un plan respaldado por acciones, se convierte en realidad”.

Una vez que respondas estas preguntas, habrás dado un gran paso para obtener el súper poder de ahorrar sin morir en el intento.

Algo importante que debes recordar es que si guardas el dinero de tus ahorros en casa, ese efectivo correrá el riesgo de ser gastado en cosas innecesarias. Y si esperas a que te sobre algo dinero para ahorrar, lamento decirte que eso quizá nunca pase. Por eso hay que automatizar el ahorro. Puedes programar una cantidad que se vaya acumulando quincenal o mensualmente para ir sumándolo a tus proyectos. Échale ojo a la opción de ahorro recurrente de CetesDirecto en donde además estarás invirtiendo tu capital de manera casi imperceptible.

“No ahorres lo que sobra después de gastar, gasta lo que te sobre después de ahorrar”, Warren Buffett.

En todo este camino de crecimiento financiero es importante aprender a identificar en qué y cómo gastas tu dinero. Hay lo que yo llamo “Gastos Vampiro”, que son los que van chupando nuestro presupuesto sin que nos demos cuenta y que en algunos casos pueden representar hasta 20% de nuestro sueldo mensual. Y como no se puede atacar lo que no se conoce, hay que tomar nota diaria del dinero que se va en pequeñas cosas. Así, al final de la semana podrás analizar en dónde puedes recortar gastos. Estos ajustes se convertirán en ahorro y esto te hará libre.

Ya lo decía el buen Kalimán: “Serenidad y paciencia... mucha paciencia”.

Si has llegado hasta este punto, ya vas de gane. Si ya identificaste cuáles son tus metas financieras y ya sabes cuánto dinero puedes ahorrar para cumplirlas, lo siguiente será mantener la disciplina de no gastar en cosas que no necesitas y resistir la tentación que puede venir de nuestro interior o representada en forma de amigos y familiares que a veces son mala influencia al momento de gastar.

Aguanta y tu esfuerzo será recompensando ampliamente. ¿Qué prefieres? ¿Tomar tu café de 50 pesos todas las mañanas o renunciar a él para ahorrar y dos años después irte a tomar un capuchino en alguna plaza de la bella Italia?

Telenord.com

El Nordeste a tan solo un click

Servicios

  • Television
  • Internet
  • Publicidad

Grupo Telenord

  • Acerca De
  • Sostenibilidad
  • Contacto
  • Terminos de Servicio
  • Politicas de Privacidad