Congestión nasal, ronquidos y otras señales de pólipos nasales: qué los causa y sus riesgos

La congestión nasal es muy común en casos de resfriado o gripe, los mismo ocurre con la pérdida del olfato o el gusto, pero cuando se vuelven una constante, podrían ser señal de otro problema. Conoce más sobre la congestión nasal, ronquidos y otras señales de pólipos nasales: qué los causa y sus riesgos.

Existen síntomas que la mayoría hemos tenido o tendremos a lo largo de nuestra vida. Incluso roncar es normal en ciertos casos, como cuando estás muy cansado o duermes en posiciones, como boca arriba. Sin embargo, cuando se convierten en una constante y empiezan a afectar nuestra calidad de vida, pueden indicar algo más.

En el caso de las vías respiratorias, existen enfermedades como la sinusitis o los pólipos nasales, que se convierten en crónicas y nos llevan, no sólo a roncar, sino a presentar otros síntomas, ¿son peligrosos?

¿Qué son los pólipos nasales?

Los pólipos nasales son bultos suaves en forma de gotas o uvas, que crecen e el revestimiento de la nariz o los senos paranasales, generalmente donde los senos paranasales se abren en la cavidad nasal, sin embargo, no son cancerosos.

De hecho, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, explica que, en general, si son pequeños no causan ningún problema, en cambio, cuando son grandes, como bloquean los senos paranasales o la vía aérea nasal, es cuando se presentan problemas para respirar, pérdida del olfato o infecciones frecuentes.

La aparición de estos bultos, se relaciona con la inflamación a largo plazo, la cual suele ocurrir con ciertas afecciones, como las alergias o asma, sin embargo, no se ha encontrado la razón exacta por la que ocurren y por qué algunas personas son más susceptibles a presentarlos que otras.

En ese sentido, son más frecuentes en los adultos de mediana edad y los jóvenes, aunque pueden aparecer en cualquier edad, explican especialistas de Mayo Clinic. Asimismo, los padecimientos que desencadenan la irritación o hinchazón a largo plazo de las fosas nasales o los senos paranasales, se asocian con los pólipos.

Por lo tanto, las siguientes condiciones te hacen más vulnerable:

• Asma
• Rinitis alérgica
• Sensibilidad a la aspirina
• Sinusitis micótica alérgica
• Fibrosis quística
• Síndrome de Churg-Strauss, el cual es poco frecuente, pero causa inflamación de los vasos sanguíneos
• Deficiencia de vitamina D

¿Cuáles son los síntomas de pólipos nasales?

Los síntomas de los pólipos nasales, varían de persona a persona, asimismo, dependerán de si son grandes o pequeños. En general, no producen ninguna sensación o molestia al ser suaves, pero cuando crecen, es cuando se presentan las molestias.

Asimismo, suelen asociarse a la sinusitis crónica, es decir, irritación e hinchazón que dura más de 12 semanas. En ese sentido, los síntomas más frecuentes, son:

• Secreción nasal líquida
• Congestión nasal constante
• Goteo nasal posterior (mucosidad que se siente en el fondo de la nariz y la garganta)
• Pérdida o disminución del olfato
• Pérdida del gusto, causado por una disminución del olfato
• Dolor facial o de cabeza
• Dolor en los dientes superiores
• Presión en la frente y el rostro
• Ronquidos
• Sangrado nasal frecuente
• Sensación de tener la nariz bloqueada

Como puedes ver, algunos de estos síntomas son similares a otros problemas respiratorios, por lo tanto, la recomendación es consultar a tu médico si las molestias duren más de 10 días y, especialmente, si empeoran, presentas problemas para respirar, visión doble, reducida o problemas para mover los ojos, así como hinchazón en esta zona.

Finalmente, en caso de dolor de cabeza que aumenta su intensidad y va acompañado de fiebre o incapacidad para inclinar la cabeza al frente, busca ayuda.

¿Los pólipos nasales son peligrosos?

En muchos casos, los pólipos nasales pueden no provocar un mayor daño, en otros el tratamiento ayuda a contraerlos o eliminarlos, sin embargo, en algunas ocasiones, pueden llevar a complicaciones.

Estas se derivan de un bloqueo del flujo de aire, así como a la irritación e hinchazón a largo plazo. Entre estos, podrías presentar:

• Apnea obstructiva del sueño, que se presenta cuando la respiración se detiene y reanuda con frecuencia durante el sueño.
• Brotes asmáticos. La sinusitis crónica y pólipos pueden empeorar el asma.

De igual modo, los especialistas señalan que puedes presentar sangrados o infección, aunque también existe el riesgo de que los pólipos vuelvan a reaparecer. Afortunadamente, existen formas de reducir la probabilidad de que regresen o se desarrollen en un inicio.

• Trata las alergias y asma. Aunque sean comunes las alergias, es importante seguir un tratamiento para controlar los síntomas.
• Evita los irritantes nasales, como el humo del cigarro, polvo, productos químicos o aquellos que te causan alergia.
• Mantén una buena higiene para protegerte de infecciones bacterianas y virales.
• Usa un humidificador para mejorar el flujo de mucosidad y evitar la obstrucción, eso sí, límpialo diario.

¿Cómo eliminar los pólipos nasales?

Existen tratamientos que ayudan a reducir el tamaño de los pólipos o reducirlos, sin embargo, también es clave tratar aquello que contribuyó a su aparición. Este tratamiento puede incluir medicamentos, pero también cirugía.

Muchas veces se inicia con los medicamentos, dependiendo tu caso particular, por lo tanto, es importante no automedicarte ni usar algo que haya sido recomendado para alguien más sin un diagnóstico y receta.

En cuando a la cirugía, esta suele recomendarse cuando los medicamentos no reducen o eliminan los pólipos. Se trata de un procedimiento endoscópico que ayuda a extirparlos.

Ahora ya lo sabes, si te sientes con síntomas de resfriado que duran más de 10 días y no parecen ceder, consulta a tu médico, podría tratarse de pólipos nasales que es mejor tratar para evitar que te causen mayores molestias.

No lo dejes pasar, vivir con congestión nasal y con ronquidos que permanecen después de días, no es normal, acude a tu médico para una revisión y diagnóstico.