Descubre por qué debes curar las ollas de cobre para carnitas: podría afectar tu salud
Hay una gran variedad de rituales que los expertos en cocina piden hacer antes de realizar un platillo y aunque no lo creas podría ser por una razón, aquí te revelamos por qué debes curar las ollas de cobre para las carnitas.
Es posible que creas que curar las ollas es un ritual que se hace únicamente por tradición, pero la realidad es que no y si no lo haces podría afectar a tus alimentos.
Seguramente has escuchado que los cazos para cocer la comida deben curarse antes de usarse, pero no sabes cuál es la razón y si prefieres no experimentarlo por tu cuenta, será mejor que leas la siguiente información.
¿Qué pasa si no curas un cazo de cobre?
Si te preguntas por qué debes curar las ollas de cobre para las carnitas, es importante que sepas que es un paso fundamental para poder utilizar el cazo durante un largo tiempo y de la manera adecuada.
Los expertos en cocina han revelado que no hacer este paso puede provocar que la comida se quede pegada en la olla, además, no daría buen sabor a los alimentos y se deterioraría bastante rápido.
¿Cómo se cura una olla de cobre?
De acuerdo con algunos expertos, para curar este material puedes mezclar agua, sal y zumo de limón o vinagre y finalmente debes dejarla con los ingredientes reposando.
Después de un rato, si la olla tiene manchas, desaparecerán fácilmente, te aconsejamos lavar el recipiente con normalidad y sin usar estropajos para evitar rallar el material.
¿Qué problemas causa el cobre?
Cabe mencionar que especialistas en la salud han indicado que usar ollas de cobre y otros recipientes para cocinar con este material no es muy recomendable.
Por su parte, National Institutes of Health, compartió que el cobre puede ser muy peligroso para la salud si se ingiere en exceso, entre los malestares que puede provocar se encuentran los siguientes:
- Lesión hepática
- Dolor abdominal
- Calambres
- Náuseas
- Diarrea
- Vómito
¿Que suelta el cobre?
Aunque el cobre se necesita para mantener una salud equilibrada, debes saber que su exposición a altas dosis puede afectarnos.
Los especialistas han mencionado que el polvo de cobre también puede provocar irritación en la nariz, boca, ojos, dolor de cabeza o mareo.
Te recomendamos evitar el uso excesivo de este material para evitar malestar en el organismo, además, si este se presenta puede ser necesario acudir con un especialista.