Seis mujeres ultimadas durante fin de semana; preocupación por alto nivel de violencia
San Francisco de Macorís.- Como un fin de semana sangriento fue calificado por la población, luego de seis hechos violentos registrados en Moca, Los Alcarrizos, y Las Terrenas, Samaná.
En el primer hecho, un miembro de la DIGESETT fue identificado como Esteban Javier Cora, ultimó Pamela de la Cruz, ex pareja; María del Rosario, ex suegra; a la cuñada Indira de la Cruz y a Liren Méndez Báez, el hombre que lo persiguió, además hirió a un menor de edad.
En otro hecho, murió también en la madrugada del domingo Carla Angélica Pérez Durán, de 20 años, quien fue herida con un cuchillo supuestamente por su novio y fue dejada abandonada en un camino solitario en la entrada del Mogote en Villa Trina, Moca, Provincia Espaillat.
Pérez Durán, según confirmaron parientes, murió mientras operada por la pérdida masiva de sangre por la herida que recibió en el cuello.
El mismo domingo, un hombre mató a su esposa, y luego intentó suicidarse en El Municipio de Las Terrenas, Provincia de Samaná.
Se trata de la señora Felicia Vilorio, de 70 años de edad residente en el barrio Hollo Cacao, quién murió a mano de su compañero sentimental, Porfirio Andújar de 50 años de edad.
Según informaciones preliminares, la occisa fue degollada, mientras se encontraba en su vivienda acompañada de su agresor, quién además intentó quitarse la vida incendiándose dentro la vivienda en la que vivían juntos, por varios años.
Porfirio Andújar, fue detenido por un hijo de la víctima, tras cometer el hecho, y se encuentra en manos de la Policía, para responder por el crimen cometido contra su esposa, la cual había sido abusada por él anteriormente, y sometido a la justicia hacen unos dos meses.
La muerte de estas mujeres víctimas de violencia de género abre nueva vez el debate sobre la necesidad de que el Estado cree políticas públicas eficientes para prevenir y detener estos tipos de crímenes.
Ciudadanos y organizaciones sociales, feministas han llamado a las autoridades a declarar un estado de emergencia por los recientes crímenes.